Camiseta oversize «Alambre de espino»

Sin duda, nuestro modelo más ansiado y codiciado y por una preciosa, valiente y dolorosa razón: la historia que hay detrás de este símbolo es la historia de una de las integrantes de Masebysatan (y casi lo único que se conoce realmente de ella): el tatuaje que porta en su brazo y que constituye el símbolo de Madebysatan.
Pocas personas saben la historia real tras la marca, pero, el alambre de espino es el amuleto de Bebi Fernández, y se ha convertido en el amuleto de miles de mujeres que lo han dibujado en su piel exactamente el mismo lugar en el que la escritora lo lleva tatuado. La autora se pronunció en sus redes cuando decidió mostrar esta parte de ella, escribiendo lo siguiente:

“Si vas a leer esto, coge antes uno de tus brazos con tu mano contraria, a la altura del bíceps. Apriétalo fuertemente. Observa el gesto. Aprieta más. Piensa en qué piensas.
Pasé mucho tiempo viendo como cogían así a las mujeres.
Identifiqué esa forma de agarrar y apretar el bíceps como un símbolo de control y violencia hacia ellas. Apretar el brazo. Para amenazarte. Para susurrar obscenidades. Para controlarte. Para evitar que te levantes de la silla. Para colocarte donde debes. Para advertirte. Para arrastrarte por el pasillo. Para después golpearte.
Comencé a mirar ese trozo de piel, el que cubre una mano, cercano al bíceps, de forma distinta. Era siempre vulnerable. Susceptible a ser presionado por unas manos violentas.
Tuve que aguantar que mancillaran ese trozo de piel muchas veces. Algunas veces, tuve que aguantarlo yo para que no lo hicieran a otras personas.
<Esconderé un trozo de alambre de espino en mí. No podrá verse a simple vista. Lo esconderé en el lugar más vulnerable, a modo de protección. Cada vez que alguien se atreva a cogerme del brazo de nuevo, o a alguna otra, un pequeño triunfo será mío. Mi metáfora les hará sangrar, pues ellos no lo saben, pero mi alambre se está clavando en sus dedos cada vez que ellos clavan en mí su violencia.>
Decidí que ese sería el símbolo. Mi símbolo. El hierro que daña a quien se atreve a hacer daño. Me recordaría quién debía ser yo. Yo sería el hierro que haría sangrar al que lo toca. Yo sería el alambre de espino.
El arma que podía defenderme era yo.
Así que me la tatué.

Tras el año 2020 (gracias por el apoyo de todas las personas a las que antaño seguía -y tuve que dejar de seguir en redes sociales-), no solo soy yo el hierro fuerte. Otras muchas mujeres decidieron empezar a tatuarse este símbolo, mientras que yo di mi beneplácito para que cualquier mujer que tuviera mi tatuaje, pudiera afirmar que era yo misma.”